jueves, 25 de septiembre de 2008

Cónyuge, amante y fato

Material de archivo (parcialmente editado)

- ¿Saliste ayer?
- Sí, con una del elenco estable, cero esfuerzo.
- ¿Qué elenco estable?
- Cinco o seis minitas que están dando vueltas siempre, hace años. Cada tanto se suma una o se da de baja otra, es como una cofradía.
- ¿Se conocen entre ellas?
- Algunas sí, pero no se hablan los muertos en el patio. Son chicas antidepresivas, ese es el principio de funcionamiento de los amantes.
- No entiendo.
- Ese es el trabajo del amante por definición. Imaginate un amante al que llamás una vez por mes y te dice “no sabés los quilombos que tengo…” y bla bla bla. Los amantes son como refugios en la tempestad de la vida diaria y se tienen que comportar como tales.
- A mí me enoja que la gente hable de "amantes" en plural como si fuera algo trivial, sin importancia. Lo que vos decís no son “amantes”, son “fatos” y nada más.
- Yo no hablo como trivial…
- El amante es otra cosa, es mucho más que eso, mucho, pero mucho más que un simple relax.
- No, Menta ¡no! Esa es TU definición de amante, que no necesariamente tiene que ser la mía.
- Pero tal parece que amante es cualquiera que te ayude a pasar el rato. Es muy grande la palabra amante para definir eso.
- En realidad es así, porque si vos querés a alguien para más que pasar un rato, para pasar TODOS los ratos, lo definís como pareja, marido y mujer, novios… El que fue amante responsable sabe que siempre está en segundo lugar.
- No. Amantes son “los que se aman”. Lo que vos decís es otra cosa. El cónyuge no necesariamente comparte TODOS los momentos, a veces (muchas veces) ni siquiera los une el amor y lo mismo pasa con el fato. El amante está por encima de todo eso. ¿Viste la pelicula de Robert de Niro, “Enamorándose"?
- Sí.
- Ellos tienen sus matrimonios casi perfectos y un día se conocen y se enamoran. Son “amantes” (no fatos) y se aman más que a sus parejas estables.
- Ahí está el tema, vos lo dijiste… "CASI"
- Y sí, porque si tenés TODO en el matrimonio, no lo buscas afuera. Si querés diversión, buscás un fato. Pero si querés “amor” de verdad, la palabra es “amante”. Lo que venga después, es otro tema.
- Entonces ¿qué puesto ocupa el amante en la vida de la pareja?
- Ninguno. Es independiente de la pareja, tal vez el complemento o más que eso, no sé. Y no me gustan los hombres que tienen un harem de amiguitas y se jactan de eso.
- Estás proyectando en mí tus vivencias.
- No es cierto.
- Sí.
- No.
- Menta...
- ¡Ufa!

4 comentarios:

Luciano dijo...

No entendí un pito. PEro si tuviera una amante terminaría destruyendo mi matrimonio porque yo no puedo servir a dos señores.

Menta Ligera dijo...

Nunca se puede servir a dos señores. Tu frase resume muchas cosas.

♋ Mariposa dijo...

jaj, una para los gastos, y otra para los gustos, se entendiò perfecto, pero cuàndo el amante quiere màs, es mejor reincidir el contrato.
besos menta!

maga dijo...

¿Con quien es esta charla? Coincido con vos en las definiciones, aunque no comparta el concepto. Siempre supe que sos una mujer fuerte y valiente, vas a estar muy bien.