martes, 19 de mayo de 2009

La intrusa

My faith is what protects me. Why do you challenge this?
(King Arthur)


Mi castillo es un fortín a prueba de entrometidos, estoy armada hasta los dientes y venderé cara la piel antes de rendirme al enemigo. Dos dragones bien fornidos montan guardia en la entrada, velan día y noche, ante el mínimo peligro avívanse sus ojos verde esmeralda y lanzan chorros de fuego por la nariz. Me protegen, como en los cuentos.

Excepto cuando los mando a paseo porque es hora de ventilar las mazmorras y sacudir el polvo, o simplemente para simular que nada ha pasado, que soy libre como los lirios del campo, que nada turbará mi paz, que no hay moros en la costa y nadie que me quiera mal.
Es entonces cuando tu odiosa figura cruza silenciosamente el puente levadizo y con curiosidad morbosa vas recorriendo los rincones en busca de un indicio, la punta del ovillo, como cuando aún no sabías de mí. Debió ser una ingrata sorpresa pero, como si no fuera suficiente, regresaste una y otra vez, acechando en la oscuridad, espiando, siempre espiando, esperando pacientemente… ¿esperando qué?

Ahora es el después, de nada servirá que huyas o te escondas, detrás de estas gruesas paredes soy poderosa como Morgana, no podrás hacerme daño, ya no.

1 comentario:

maga dijo...

QUIEN???????? Mira que vamos todos y le hacemos un piquete!!!! Me encanta como decis las cosas con forma de cuentito, la amenaza velada y todo eso, idola!!
Cuidate nena, besos.