martes, 25 de agosto de 2009

Therapy

“Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla.” (Sigmund Freud)

Fedra estaba descalza cuando entré. Los pies enfundados en unas grotescas medias de lana maravillosamente calentitas. El gato colorado y rechoncho que se refregaba entre sus piernas me observó fijamente maullando con actitud solapada.
La casa es vieja, huele a humedad y a cientos de miles de historias, algunas arrancadas a fuerza de llanto y pastillas, la mayoría culposas, vergonzantes, todas cubiertas bajo el sagrado manto de la confidencialidad.
Accedí a regañadientes pues no creo en estas cosas. A veces pienso que no hay mejor analista que uno mismo pero Nati dice que no es suficiente, esta vez no. Y, un poco a la fuerza, logró sentarme en el sillón verde de Fedra con la promesa inconsistente de desvanecer la nube negra que enturbia mi cabeza.

-Está muy bien que escribas. Pero yo no voy a leer porque lo que de verdad me interesa es todo aquello que NO escribís.
-Glup… (si empezamos así…)
-¿Escribir te ayuda a escapar?
-¿Eh? No sé, puede ser… Sí, un poco.
-¿De qué escapás?
-Y… de las cosas que me hacen sufrir. Pero…
-El sufrimiento siempre es la consecuencia de algo. ¿Qué cosas te hacen sufrir?
-Perder a un ser querido, la crueldad, la mentira, la soledad…
-¿Qué más?
-(Uffffffa… no me voy más de acá) Sentirme obligada a actuar como los demás creen que está bien. Resignarme, no poder elegir…
-¿Qué es lo que no podés elegir?


Para ese entonces quería correr escaleras abajo y entregarme al frío de la noche, trepar a un
colectivo que me alejara de ella y de su gato malvado y de un interrogatorio que no hace sino agobiarme más.
Pero Fedra continuó inmutable hasta que sonó el gong que señalaba el fin del primer round. Entonces cerró su libreta y, con suma parsimonia, me acompañó hasta la puerta. El gato no nos perdía pisada.

-No es suficiente con creer que algo es como es. Hace falta carnalizarlo, hacerlo propio.
-Yo le pongo voluntad pero no es fácil…
-Claro que no. Tenemos mucho trabajo por delante.

Y me estampó un sonoro beso en la mejilla que, a pesar de mis muchos prejuicios, casi logró convencerme de que puedo estar pisando el buen camino.

3 comentarios:

♋ Mariposa dijo...

La verdad Menta, me parece muy bien! te va a hacer bien, yo di en contra de mi voluntad tambièn con una persona que me saco adelante y cambio mis pensamientos en un mes masomenos, pero en realidad ella no los cambiò, la que los cambiò fui yo...
te mando un beso enorme!!! y hay que parar de pensar un poco... te voy a mandar un mail, cuando descanse un poquitin mi cabeza, por lo pronto hoy te envio uno q te va a gustar,
besitos!!!!

Menta Ligera dijo...

No se si seguire, me espanta un poco que me revuelvan la cabeza, ni yo se que pueden encontrar.. Pero, si, es cierto que hace bien y se ve que lo estaba necesitando.
Mandame!! Gracias!
Te mando besos

Luciano dijo...

Como dice un amigo: yo con tomar un café con un amigo y hablar ya estoy.
Pero nunca tomamos un café y hablamos.
Mal no te va a hacer, a mi me vendría bien.